La ministra de Salud de la provincia, Judit Di Giglio, hizo referencia a la evolución del COVID-19, en el marco de los nuevos casos evidenciados en Ushuaia y Río Grande.
Las declaraciones llegaron después de conocerse un caso sospechoso de coronavirus entre los empleados de una sucursal de La Anónima de Ushuaia, que obligó a la empresa a poner en cuarentena a 10 empleados más. Asimismo, el fin de semana, en Río Grande quedaron aisladas unas 14 personas entre médicos y agente de la salud que tomaron contacto con una comitiva ushuaiense que fue a capacitar en el uso del servicio de emergencias 107.
Sin referirse a ninguno de los dos casos puntuales, sino forma general, la funcionaria indicó que tal como se había previsto “dentro de la evolución de esta pandemia, estamos detectando transmisión comunitaria del virus dentro de focos o conglomerados”, sin embargo, se intensificará la cuarentena ya establecida.
En este sentido detalló que ello se presenta sobre todo en el grupo de trabajadores “de servicios esenciales que no pueden respetar el aislamiento obligatorio y del que forman parte los agentes de salud, los trabajadores de las fuerzas, de Defensa Civil y de los Supermercados”.
“Esto se debe a que son las personas que están trabajando y que no pueden respetar la cuarentena o el aislamiento social obligatorio. Estos conglomerados eran esperados, es la manera de proceder de la pandemia” aseguró la titular de Salud.
Asimismo agregó que “si bien los profesionales de salud cuentan con todos los elementos de protección personal, son las más expuestas y es esperable que algunos de ellos puedan adquirir la infección pro COVID-19”.